Los concejales del Partido Popular en Puerto del Rosario, Fernando Enseñat, Ignacio Solana y Clara Peña, denuncian en la nota enviada a Crónicas una vez más el abandono, la suciedad y la falta de iluminación en que se encuentra la capital, que ahora más que nunca requiere del Ayuntamiento un esfuerzo para cuidar su imagen ante el comienzo de la temporada de cruceros, que ya han empezado a atracar en Puerto del Rosario.
Los populares aseguran que denuncian la situación "ante las quejas continuas de los vecinos por el estado en el que se encuentra de suciedad y abandono las calles de Puerto del Rosario". “El estado en el que se encuentra nuestra capital es una vergüenza: nunca había estado tan sucia. El alcalde debe preocuparse por que Puerto del Rosario sea una ciudad limpia, iluminada, con zonas verdes cuidadas y con el paseo marítimo en buen estado, no solo para los turistas sino también para el disfrute de los vecinos”, afirma Enseñat.
Los concejales populares defienden que el sector de cruceros es y debería ser un motor económico para el municipio, que dinamice y genere riqueza a todo nuestro sector comercial y de restauración. “¿Pero cómo vamos a rentabilizar el turismo de cruceros sí ofrecemos una ciudad sucia y donde no se cuidan nuestras calles y jardines, donde no potenciamos ni ayudamos a las empresas que ofrecen productos locales y servicios turísticos en el municipio?”, se pregunta Solana.
El grupo popular municipal se pregunta, además, dónde quedó, aparte de en un certificado, el sello Puerto del Rosario Destino Turístico Inteligente y todos los anuncios realizados por parte del alcalde y su grupo de gobierno. “Hoy nos visita el tercer crucero de la temporada y estamos prácticamente igual que hace tres años, cuando empezó la legislatura: seguimos sin ofrecer un destino de calidad, una ciudad amable al turista; seguimos sin convertir nuestros pueblos en polos de atracción turística a través de la cultura y el patrimonio; seguimos sin aprovechar el turismo de crucero para ayudar y potenciar a nuestro sector comercial y de restauración; e, incluso, seguimos hasta con la misma oficina de turismo”, denuncia Enseñat.
