Fondos buitre se están apoderando de hoteles y otros establecimientos turísticos de Canarias, a unos precios ridículos. También están comprando deuda barata a los bancos y presionando a los clientes de una manera atroz. Nadie actúa contra ellos por acoso contra esos clientes morosos. Morosos porque no pueden pagar. La sociedad empresarial española ha sido desamparada por su Gobierno de una forma terrible y como existe una parte de la población que afortunadamente no recibe ni esa presión ni ese abandono, pues la calamidad pasa casi desapercibida. En Canarias estamos sufriendo un verdadero acoso de los especuladores contra la industria turística y nadie hace nada. Me gustaría saber si la consejera de Turismo tiene conocimiento de ello y si ha trasladado a su Gobierno autónomo esta circunstancia. Ahora que no tiene trabajo con las promociones debería solicitar un informe de lo que está ocurriendo. Tengo las mejores referencias de Yaiza Castilla, aunque no la conozco personalmente, pero me da que no se ha enterado del todo de lo que está pasando en el sector turístico de las Islas Canarias, tan a punto de la ruina. Digo a punto porque cuando haya que empezar a pagar los intereses de los créditos ICO y cuando los ERTE sean historia, el agobio económico que los empresarios supervivientes van a sufrir será muy fuerte. Y, para más inri, llegan los buitres, miembros de esos fondos, radicados en Man, Gibraltar, Luxemburgo, Delaware y otros paraísos camuflados y protegidos por los países que conforman la decencia universal del blanqueo de capitales y del enriquecimiento desmesurado. A veces tan bien tratados por la justicia española y europea, porque las leyes los favorecen. En fin, que aquí en Canarias, la dependiente región del turismo, vamos a tener también un doloroso regreso a la normalidad. Va a ser carísimo este regreso, ya lo verán. Atenta, Yaiza.
Publicado en Diario de Avisos