El presidente de Canarias, el socialista Ángel Víctor Torres, ha rechazado el ultimátum que ha dado la alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno (CIUCA), a los hoteles que acogen inmigrantes para que dejen de hacerlo antes de fin de año, al estimar que no caben exigencias de este tipo ante la "situación dramática" que entraña la vigente crisis migratoria.
Según informa cope.es, Torres ha pedido este viernes que se haga "un poco de historia" y se recuerde que durante el confinamiento al que llevó el estado de alarma decretado desde marzo en España, período en el que siguieron llegando pateras desde África, el Gobierno canario cedió colegios y albergues propios para que fueran utilizadas para dar cobijo a las personas que arribaban a las costas de las islas en barquillas.
Con la llegada de la nueva normalidad, ha rememorado, el Ejecutivo regional tuvo que recuperar los espacios que había cedido para ayudar a absorber el repunte migratorio que afecta este año a las islas.
Fue entonces cuando se produjo "el colapso", dadas las carencias que presenta la red estatal de acogida humanitaria en el archipiélago, que quedó desmantelada tras la crisis de los cayucos de 2006-2007.
Por ese motivo, el Ministerio de Migraciones tuvo que recurrir a firmar contratos con establecimientos turísticos de las islas que tuvieron que suspender su actividad por el cierre de fronteras decretado para tratar de evitar la propagación de la pandemia en el archipiélago.
"La respuesta del sector empresarial entonces fue ejemplar, en el sentido de que reconoció la emergencia y urgencia de la medida, del mismo modo que expuso que debía ser temporal porque los espacios alojativos tienen otro fin, albergar turistas", ha resaltado el presidente canario.
Esos contratos expiran el 31 de diciembre y la intención de Migraciones es que los inmigrantes acogidos en esos hoteles estén por entonces "en otros espacios, que es lo que debe ser", ha aseverado Torres en referencia al plan presentado hace días en Las Palmas de Gran Canaria por el ministro José Luis Escrivá y que prevé realojar en breve en campamentos a los 6.000 inmigrantes acogidos en hoteles para, posteriormente, albergarlos en otras 7.000 plazas habilitadas en inmuebles cedidos por Defensa, Bankia y algunas corporaciones locales.
"Eso es lo que están pidiendo los empresarios, a los que agradezco la colaboración que han tenido. Lo que me parece es que no se puede decir que tiene que ser el 31 de diciembre sí o sí, porque, si finalmente es el 5 de enero, ¿qué hacemos con esas personas, las mandamos a la calle?", ha aseverado.
El titular del Gobierno canario también ha aludido a la petición que ha formulado el Defensor del Pueblo al Ministerio del Interior para que "cierre de inmediato" el campamento instalado desde el pasado mes de agosto en el muelle grancanario de Arguineguín, donde este viernes han amanecido 736 personas, según la Delegación del Gobierno en Canarias.
Torres ha informado de que tiene previsto reunirse con el titular en funciones del Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, quien visitará Canarias la próxima semana, y ha recalcado que el Ejecutivo que preside ya había pedido con anterioridad al Gobierno español el cierre de este campamento.