El vicepresidente canario y consejero de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos, Román Rodríguez, consideró este martes la posibilidad de una regulación más flexible para la práctica deportiva durante la pandemia, de modo que se compatibilice la preservación de la salud pública con un mayor margen de maniobra para las empresas y profesionales que se dedican a prestar estos servicios. Un asunto que asume especial importancia en islas como Lanzarote, donde las limitaciones durante más de un mes con la fase 4 han causado auténticos estragos en esta materia, tanto en el deporte profesional como en el aficionado y, lo que es peor, en el deporte base.
Rodríguez, según explica el Ejecutivo en nota de prensa, se reunió este martes con representantes de la plataforma Más Deporte, de quienes valoró su alta cualificación y predisposición para alcanzar acuerdos que permitan, por un lado, garantizar la práctica de la actividad deportiva a los ciudadanos y, por otro, el mantenimiento de los 29.000 puestos de trabajo asociados a la misma.
El vicepresidente recordó que el objetivo más importante en estos momentos es el mantenimiento de la salud, pero que, una vez que se pueda garantizar el cumplimiento de las normas, no debería haber grandes obstáculos para promover el bienestar entre la sociedad.
En este sentido, Rodríguez se comprometió a estudiar el asunto, de forma que, efectivamente, se puedan establecer nuevas pautas que eviten mayores perjuicios a las empresas y profesionales deportivos, “siempre -insistió- preservando la salud pública”.
También apoyó la pretensión de la Plataforma de reconocer este sector como una actividad económica de primer nivel, no solo a la hora del desarrollo reglamentario de la actual Ley Canaria del Deporte, sino también para la captación de fondos europeos asociados al React-EU como empresas afectadas por la pandemia.