La portavoz de Coalición Canaria-PNC en el Congreso de los Diputados, Ana Oramas, ha acusado al ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá de “ocultar” los recortes en materia de pensiones y rechazó este miércoles el anteproyecto de ley que recoge la reforma parcial del sistema al considerar que “deja fuera los asuntos más conflictivos”.
Oramas reprocha en la nota enviada a Crónicas que no se hayan concretados los planes del Gobierno de España en el acuerdo suscrito con sindicatos y CEOE y acusó al ministro de impulsar la reforma del sistema público de pensiones sin consenso político y pensando más en “la foto del presidente Sánchez con sindicatos y patronal que en la propia reforma”.
La diputada nacionalista advierte que la negociación que se ha anunciado culminará en otoño, para cumplir con la reforma global pactada con Bruselas, “es la de los ajustes y la de los recortes” y avisó que “espero no se haga por la puerta de atrás vía enmienda a este proyecto de ley, sin los consiguientes informes preceptivos y sin acuerdos políticos”.
Oramas rechaza en la Comisión de seguimiento y evaluación de los acuerdos del Pacto de Toledo que el Gobierno del PSOE lleve a cabo una política de “hechos consumados”. “Ustedes vienen aquí después de haber aprobado este anteproyecto de ley en Consejo de Ministros sin buscar los acuerdos y consensos políticos” que requiere un asunto como la reforma del sistema de las pensiones.
Asimismo, señaló que los planes del Gobierno de Sánchez “no garantizan el futuro de las pensiones, puesto que, lo que están aprobando es un parche” y criticó al ministro que reconociera y luego desmintiera que el coste de la reforma lo tendrían que asumir la generación del baby boom.
La diputada apunta al ministro que “usted dijo lo que pensaba y luego le tocó retroceder para no poner en riesgo la firma y la foto con sindicatos y patronal”. En este contexto, calificó de “injusto que los que más aportaron al Fondo de Reserva de la Seguridad Social, los que más años han cotizado, es decir, los del baby boom van a ser los que cobrando menos o trabajando más resuelvan que cuadren las cuentas del sistema público de pensiones”.
Oramas rechaza que el ministro de Seguridad Social esté “más preocupado por la generación que hoy tiene 30 años, que pueden hacer sus previsiones, que los que tienen 59, 60 ó 61 a los que este Gobierno quiere cambiar las reglas del juego al final del partido”.
Asimismo, apunta que el sistema de pensiones solo se puede mantener “con más trabajadores, más empleo, con mejores salarios y mayor productividad” y recordó que a “los 10 millones de pensionistas hay que sumar los 4 millones de trabajadores públicos y los 3 millones de parados, es decir, 17 millones de obligaciones salariales públicas que no se pueden sostener sin un incremento del empleo y de la actividad económica”.
Por último, se refiere a las pensiones no contributivas a las que calificó como “unas pensiones mínimas del hambre, vergonzosas, son un fraude” y reconoció “no son motivo para felicitaciones ni para fotos” aludiendo al PSOE.