El Consejo de Gobierno de Canarias aprobó este jueves la generación de un crédito de 165 millones de euros para sufragar las ayudas directas a los sectores más perjudicados por la crisis y anunciadas a finales del pasado mes por el presidente y el vicepresidente, Ángel Víctor Torres y Román Rodríguez, respectivamente.
El acuerdo establece que los 165 millones de euros se tomarán de los remanentes de tesorería de los dos últimos años, si bien esta circunstancia no impedirá en ningún caso a la Comunidad Autónoma seguir cumpliendo los plazos de pago a proveedores. Es más, su habilitación con cargo al superávit es posible por la inaplicabilidad de los objetivos de estabilidad, de deuda pública y la regla de gasto para los ejercicios 2020 y 2021, que permite a la Comunidad Autónoma destinar esos fondos a usos diferentes de la reducción de deuda.
Con la generación de este crédito, el Gobierno da el paso previo y preceptivo para la concesión de ayudas directas al sector turístico, pequeñas y medianas empresas (pymes) y autónomos de las Islas que se han visto afectados gravemente por las restricciones derivadas de la lucha contra el Covid-19.
La decisión adoptada hoy por el Ejecutivo entronca, además, con la Prioridad Estratégica 5 del Plan Reactiva Canarias, relativa al impulso de la actividad económica y que se articulan en dos grandes líneas o ejes: uno, en el que se incluyen actuaciones de naturaleza general, orientadas al conjunto de la economía, y otro, con medidas debidamente sectorizadas.
Desde esta perspectiva, se establecen diversas medidas, entre las que caben destacar las relativas a la aportación de liquidez a las empresas y personas trabajadoras autónomas o el impulso de líneas de financiación de tesorería y circulante para las pymes, además de las consistentes en ayudas a fondo perdido, es decir, subvenciones, para ayudar a las empresas a compensar los gastos en los que hayan tenido que incurrir para hacer frente a la crisis y que vuelvan a impulsar nuevos proyectos.
Precisamente, la Consejería de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos ya aprobó, solo una semana después de anunciar la media, una moratoria fiscal que permite a los contribuyentes el aplazamiento de deudas tributarias y la inyección de liquidez a la economía canaria de 240 millones de euros.
A esta medida se unirán ahora las ayudas directas, cuya convocatoria está ultimando el Ejecutivo, por los citados 165 millones de euros, lo que situará Canarias como una de las comunidades autónomas que mayor esfuerzo ha realizado para el alivio fiscal y el auxilio económico de pymes y autónomos.