La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias informa que desde la puesta en marcha del sistema automatizado de la incapacidad temporal por COVID-19 se ha tramitado 11.413 bajas laborales. Esta cifra corresponde al perfil del paciente positivo en COVID-19 o contactos estrechos no vacunados que son menores de 45 años con sintomatología leve, para quienes se diseñó esta herramienta que libera de carga administrativa a los médicos de Atención Primaria en estos momentos de mayor presión asistencial.
De los 11.413 expedientes, 10.254 se corresponden con personas positivas a SARS-CoV-2 menores de 45 años con sintomatología leve y el resto, 1.159, son personas que han sido contacto estrecho y tienen que realizar cuarentena por no estar vacunadas, no tener la pauta de vacunación completa y que no han pasado la enfermedad en los últimos 180 días o bien pacientes inmunodeprimidos que han sido contactos estrechos con casos positivos.
Por otro lado, en estos primeros días de funcionamiento de este sistema automatizado, que se ha ido implantando progresivamente, se ha ampliado el tiempo de baja a un total de 112 bajas emitidas previamente al haber experimentado el paciente mayor sintomatología, por lo que ha tenido que ampliársele el periodo de aislamiento prescrito inicialmente hasta la desaparición de los síntomas.
Además, se han enviado los SMS correspondientes con los que se comunica automáticamente el alta al paciente tras haber pasado los siete días de aislamiento establecidos en la Estrategia de Detección y Seguimiento de casos Covid, tanto para casos confirmados como para contactos estrechos.
Automatización de la incapacidad temporal
La automatización de las incapacidades temporales busca agilizar el trámite al paciente, al que se le evita acudir a la consulta cuando únicamente necesitaba tramitar la baja y el alta médica, y descongestionar la actividad de Atención Primaria con una sobrecarga actualmente debido al elevado número de casos registrados en el último mes.
Grupo de apoyo para la gestión de las bajas
Con el objetivo de aliviar la carga de trabajo de Atención Primaria, que es la encargada de tramitar las bajas y altas médicas, el SCS creó un grupo de apoyo formado por 45 médicos que de forma centralizada gestiona las bajas de los casos leves o asintomáticos que no precisan seguimiento clínico y que para lo único que contactan con el sistema sanitario es para dicho trámite. Este equipo está formado por especialistas de Salud Laboral, Inspección Médica y Administración Sanitaria.
Cómo funciona
El paciente Covid que necesita tramitar la baja ha de contactar con la línea 900 112 061, donde el sanitario, en función del estado de salud, la edad, el estado de vacunación y la existencia o no de patologías previas, lo identificará para ser remitido al equipo centralizado o al médico de Atención Primaria del paciente, según su perfil. En cualquiera de los dos casos el paciente recibirá la llamada de un facultativo quien le hará el trámite sin que tenga que desplazarse.
En el caso de que el paciente Covid tenga síntomas leves, sea joven y reúna el criterio del sistema automatizado, esa solicitud se deriva a los facultativos del equipo centralizado. De ese modo, el médico del equipo centralizado contacta con el paciente, comprueba que su estado de salud y le genera el parte de baja que de forma instantánea se comunica por internet al INSS. Además, le activa de forma automática el de alta a los siete días, siempre y cuando no presente complicaciones. Si su evolución es favorable recibirá un SMS con el parte de alta al número de teléfono móvil registrado en su tarjeta sanitaria, sin que se precise una nueva prueba diagnóstica de confirmación.
Los pacientes que a lo largo de ese periodo presenten síntomas que no sean leves o no hayan mejorado deberán llamar a la línea 900 112 061, y se interrumpirá el proceso de gestión del alta automatizada para ser citado por su médico de familia.
Perfil del paciente: menor de 45 años y con baja complejidad clínica
La emisión automatizada del proceso de incapacidad temporal con carácter extraordinario pretende dar respuesta a la resolución de los procesos de baja complejidad clínica por COVID-19. De ahí que se establezca que la edad idónea para este tipo de trámite sea en menores de 45 años, que por lo general es un sector de población con una prevalencia menor de patologías crónicas y factores de riesgo y que cursa el COVID-19 de forma asintomática o leve con mayor frecuencia.
Este proceso se adapta a las últimas recomendaciones emitidas por el Ministerio de Sanidad en cuanto al periodo de aislamiento, establecido en siete días si desde el cuarto no hay aparición de síntomas, y será aplicable a aquellos pacientes con estos perfiles:
-Personas con 45 años o menos, con test positivo (PCR o PDAG) asintomáticos, vacunados y sin factores de riesgo que no puedan realizar teletrabajo.
-Personas con 45 años o menos, con test positivo, con síntomas leves (fiebre, tos seca, astenia, mialgias odinofagia, cefalea, rinorrea, anosmia, ageusia), vacunados y sin factores de riesgo.
-Pacientes contactos estrecho, sin vacunación completa y que no hayan pasado el COVID-19 en los últimos 180 días, que precisen cuarentena.
-Pacientes contacto estrecho inmunodeprimidos.
Se consideran factores de riesgo: hipertensión arterial, diabetes mellitus, cardiopatía isquémica, nefropatía, EPOC, inmunosupresión por causa intrínseca o extrínseca, obesidad, proceso oncológico activo, mujeres embarazadas, otras enfermedades crónicas a valorar por el clínico.
Prolongación de la baja
En caso de que el paciente requiera una prolongación del tiempo de aislamiento, el programa permitirá la cancelación del alta y la baja se mantendrá abierta hasta la resolución de la situación clínica a valorar por su médico.
Cuándo requerirá valoración médica para el alta
Los pacientes con mayor sintomatología deberán ser valorados al alta, confirmando la ausencia de síntomas para cerrar el proceso.