viernes. 29.03.2024

El pastor Ángel, referente de Misión Cristiana Moderna,  denunció hoy, en Cope Fuerteventura, la situación de “desamparo” que sufre la entidad por parte del Estado, a pesar de la labor que realiza en la atención a las personas migrantes que arriban en patera a la isla y que les ha abocado a "un estado de indigencia”. También denuncia la deficiente atención de los abogados del Estado que deben atender a los emigrantes. En la entrevista dio cuenta, además,  de la visita de Sophie Muller, representante de ACNUR, a las instalaciones de la entidad con el objetivo de “dar voz” a los migrantes y visibilizar sus necesidades.pastor-angel-MCM

La representante de ACNUR Sophie Muller ya tenía conocimiento previo de la labor que realizan ustedes

Dice que había oído hablar de mi. Cuando llegué a la puerta me dijo: ¡Qué honor!. Honor sería en todo caso el mío. Me explicó que había oído hablar de  mi, que tenía muchas ganas de conocerme y de conocer la labor que hacemos.

¿Motivo de la visita de la representante de la ONU?

La misión es dar voz, dar una voz potente ante los altos cargos nacionales que trabajan con la migración sobre las necesidades que surgen con respecto a la migración, de acogida, jurídicas, de asilo, de muchas cosas que padecen. Nuestra trabajadora social le puso al día y le trasladó que hay una deficiencia muy grande en todos los agentes que trabajan con la migración. El tema del apoyo jurídico, por ejemplo, que no se está desarrollando.

¿No hay apoyo jurídico?

Hay una asignación de unos abogados del Estado que te mandan un mail desde Las Palmas pidiéndote reunir al grupo de migrantes que les tocó. Pero, hombre, venga usted acá y haga el trabajo que tiene que hacer. No puede estar pretendiendo que hagamos su trabajo. Cada migrante tiene asignado un abogado, pero los ponen en grupos. Desde 2018 hemos atendido a unos 500 migrantes y la atención jurídica ha sido mínima. Una vez vino una parejita, hablaron con ellos y nada más. Pero aquí hay casos de personas que tienen derecho a un asilo. Por ejemplo, un joven perseguido por su familia y por su pueblo por renunciar al islam. Cuando le preguntas qué busca aquí, te responde: libertad y paz.

¿Qué es lo que más llamó la atención de la representante de ACNUR de la labor que realizan?

Lo que más le impresionó es cómo se financia la atención a los migrantes. Le dije que partía de la solidarridad financiera de la entidad que vive de las aportaciones de los miembros de la Iglesia. Que estamos en una situación complicada, que esto nos ha complicado financieramente muchísimo. Nos ha dejado en un estado, no de ruina, pero sí de números rojos. Que hemos ido tirando de la solidaridad de amigos, de otras entidades religiosas que nos han ido ayudando y, principalmente, hemos estado en un estado de indigencia. Nos hemos convertido en unos indigentes. Pidiendo a empresas, pidiendo a organismos que nos den lo básico, alimento. Al Estado le hemos pedido alimento a través del proyecto que hemos presentado para convertirnos en un Centro de Acogida de Emergencia y Derivación, y que no nos han aceptado por dos míseros meses.

¿Para qué convertirse en un CAED?

El Estado nos dice que no nos puede ayudar porque no somos un CAED. Hay partidas que se destinan a los CAED que presentan proyectos y reciben dinero. Nuestro proyecto pasaba por recibir alimento. Faltaban dos meses para poder constituirnos en un CAED. Exigen un cierto tiempo trabajando para migrantes que llegan en pateras a pesar de que en el artículo seis de lo que rige estas leyes no se hace mención específica a las pateras. Vemos aquí que no hay voluntad por ayudar. Por consiguiente, nosotros ya hemos parado toda lucha al respecto y nos hemos quedado desamparados por el Estado siguiendo en la misma línea de mendicidad. Pidiendo y gracias a la solidaridad del pueblo majorero. Y hay una respuesta importante pero es mucha gente. Hay ahora mismo unas 170 o 180 personas en las instalaciones de Misión Cristiana Moderna y hay 59 personas más en la nave del Queso del Cabildo.

Los bulos sobre migración han impactado enormente en las redes sociales, ¿cree que hay un problema de racismo en la sociedad majorera?

En el último bulo detectamos una clara intencionalidad de dañar nuestra entidad. Decía algo así como: no vayas por la zona de Misión Cristiana Moderna. No creo que en Fuerteventura, ni creo que la persona que hizo el bulo sea una persona racista. Creo que lo que había de fondo era intentar dañar a la entidad.

 

“Nos hemos quedado desamparados por el Estado siguiendo en la línea de la mendicidad”