Los representantes del proyecto Ciudad Amiga de la Infancia de Puerto del Rosario, dirigido por la Concejalía de Servicios Sociales del Ayuntamiento capitalino, que gestiona Yanira Domínguez Herrera, se han coordinado con las responsables técnicas del proyecto piloto que nace de una propuesta del CEIP Agustín Millares Carló para la inclusión del alumnado TEA de este centro educativo preferente y del centro Pablo Neruda en el proyecto.
El trastorno del espectro autista es una condición neurológica y de desarrollo que afecta en cómo una persona se comporta, interactúa con otros, se comunica y aprende, existiendo una carencia en la habilidad de llevar a cabo un intercambio comunicativo recíproco.
En este sentido, los enfoques educativos apropiados, el apoyo de las familias, de profesionales y la facilitación de las Administraciones públicas pueden mejorar la calidad de vida de las personas con autismo, informa la nota enviada a Crónicas. Por ello, desde el proyecto Ciudad Amiga de la Infancia se pretende hacer llegar la experiencia tan positiva que se está teniendo en los centros educativos también a la vida comunitaria y social de Puerto del Rosario.
La actuación incluye la señalización con pictogramas en lugares de interés, zonas públicas y entornos, lo cual facilitará la interpretación y el reconocimiento de dichos lugares, creando rampas de acceso cognitivo y eliminando barreras de comunicación, dando lugar con ello a un entorno más visual e inclusivo, no solo para las personas con autismo, sino para otras muchas que presentan alteraciones en la comunicación, dificultades con el idioma o déficit cognitivo, entre otras.
Se trata de una acción transversal que precisa de la coordinación y la colaboración de diferentes concejalías municipales, entre las que se incluye la Concejalía de Accesibilidad, dirigida por Lilian Concepción, la de Tráfico, que gestiona Peña Armas y la Concejalía de Servicios y Comercio, que dirige el edil José Juan Herrera.
En palabras del alcalde capitalino, Juan Jiménez, “es la visión de este equipo de Gobierno la de trabajar de manera interdepartamental, apostando por el trabajo técnico conjunto como eje vertebral que garantice la consecución de los objetivos y logros planteados en este proyecto, el cual se pone en marcha con la finalidad de mejorar la calidad de vida de las personas con autismo y también de otras que presentan alteraciones en la comunicación, dificultades con el idioma o déficit cognitivo, entre otras, a través de señalizaciones con pictogramas en nuestro municipio que faciliten entornos más visuales e inclusivos para ellas”.
Hay que destacar que este proyecto suma sinergia también con AMATEA, una asociación cuyo objetivo nace con la intención de ayudar a los/as niños/as autistas a desarrollar sus capacidades y promover su bienestar para conseguir una mejor comunicación e interacción con las personas de su entorno, favoreciendo así la mejora de los derechos de la población infantil y juvenil del municipio. En los diferentes encuentros para el impulso de esta iniciativa estuvo presente también la terapeuta ocupacional, Carmen Lozano, de la Asociación AMATEA.
