El Gobierno español hace una lectura positiva de la decisión de Reino Unido de empezar a evaluar de manera singularizada la situación epidemiológica de las islas para adoptar recomendaciones o restricciones de viaje, aunque por el momento el nuevo enfoque no afecta a España.
En declaraciones a Europa Press recogidas por cope.es, el secretario de Estado de España Global, Manuel Muñiz, ha saludado tanto esta decisión como la propuesta que hizo el pasado viernes la Comisión Europea para tratar de armonizar las restricciones de viaje en el seno de la UE sobre la base de un mapa epidemiológico único.
"Va en la línea de lo que planteamos a todos los socios europeos", ha dicho Muñiz. El Gobierno defiende que una evaluación epidemiológica regional (autonómica, en el caso de España) es más adecuada y puede ayudar a limitar el "impacto adverso" que tendrá en le economía el tener que convivir un tiempo con el virus.
Según ha explicado, un enfoque territorializado "posiciona bien a las islas", a Baleares y en particular a Canarias, que tiene una incidencia menor del virus y que cuenta con una temporada turística de invierno importante. Reino Unido, Alemania, Francia y los países nórdicos son los mercados claves para el archipiélago, y son países con los que Exteriores mantiene interlocución constante, ha señalado.
Si la propuesta de la Comisión Europea sale adelante, ha señalado, Canarias podría ser una "zona ámbar": regiones que registren entre 25 y 150 nuevos contagios por cada 100.000 habitantes en las últimas dos semanas con un porcentaje de positividad de los tests realizados inferior al 3 por ciento, para las que Bruselas sugiere (que no exige) PCR o cuarentena.
Por el momento es solo una propuesta de la Comisión pero Muñiz es "razonablemente optimista" sobre la posibilidad de un acuerdo, dada la acogida que el documento ha tenido en los distintos gobiernos. Con todo, aunque la propuesta sea valorada positivamente por el Consejo, toda decisión final sobre las fronteras es exclusivamente competencia de los gobiernos.
RECOMENDACIONES DE BRUSELAS
El Gobierno español siempre ha sido partidario de una coordinación en el ámbito europeo, con armonización y reciprocidad, para simplificar y dar más certidumbre. Unos criterios y recomendaciones "claros y objetivos" por parte de Bruselas permitirían que los gobiernos tomasen decisiones a partir de ellos y harían innecesarias conversaciones bilaterales.
Cuestión distinta es Reino Unido, que aún se rige por las normas europeas pero vislumbra ya el fin del periodo de transición del Brexit, el próximo 31 de diciembre. Reino Unido es el principal emisor de turistas a España, con 18 millones de personas en 2019.
Este país no ha dado a conocer aún los criterios con los que evaluará la situación de las islas pero Exteriores valora positivamente que las revisiones sean semanales, es decir, en un proceso bastante ágil.
Eso sí, por el momento, el primer efecto de la nueva política británica ha sido imponer cuarentena a los viajeros procedentes de siete islas griegas que hasta ahora, como el resto de Grecia, estaban exentas de esa restricción.