El Cabildo retira el vallado de La Casa del Inglés
La institución adoptó la resolución a las 22:00 horas de este miércoles, evidenciando el peligro que supone este vallado particular sin autorización para la seguridad vial y ciudadana
Para garantizar la seguridad vial y ciudadana, ante el peligro que supone el vallado para la circulación y la posibilidad de derrumbe del inmueble, el Cabildo de Fuerteventura ha iniciado a mediodía de este jueves 17 de enero la retirada del vallado que apareció a finales de enero cercando la Casa del Inglés (La Oliva), un edificio declarado Bien de Interés Cultural, que había sido adquirido por la institución tras desembolsar más de 300.000 euros.
Así lo ha valorado el presidente Sergio Lloret Según en un audio remitido por los servicios de comunicación de la institución. Lloret informó que a las 22:00 horas de la noche anterior se adoptada la resolución administrativa dando conocimiento a los departamentos implicados, Carreteras, Patrimonio y Secretaria General, para "la retirada inmediata de este vallado, que no consta que contara con los títulos habilitantes", e iniciando "los procedimientos que correspondan para depurar responsabilidades", dado que ese vallado afectaba a un inmueble catalogado como Bien de Interés Cultural.
Le acompañaron el consejero de Patrimonio Histórico, Rayco León, quien indicó que la retirada del vallado perimetral de la Casa del Inglés servirá para "desarrollar cuanto antes ese proyecto de rehabilitación, para poner la Casa al servicio de la ciudadanía acogiendo actividad cultural", mientras que la vicepresidenta, Lola García, añadió que "la ciudadanía llevaba reclamando este inmueble desde hace años, y hemos tenido que actuar de esta manera en vistas de lo que estaba pasando estas últimas semanas".
Lloret también reclamó responsabilidad al Ayuntamiento de La Oliva, solicitando que remitiera la documentación que hubiera habilitado el vallado.
Cabe recordar que a finales de enero apareció una cerca metálica rodeando la Casa del Inglés (La Oliva), con un cartel reclamando su propiedad para la familia de Ramón González Brito, padre de Domingo González Arroyo, presidente de Gana Fuerteventura, el partido de la alcaldesa Pilar González. La primera edil manifestó públicamente que el inmueble pertenecía a su familia, y que el vallado se autorizó por licencia municipal concedida en 2001, antes de su declaración como BIC en 2005.
No obstante, el vallado no habría contado con la autorización del área de Patrimonio del Cabildo de Fuerteventura que sería preceptivo, al tratarse de un Bien de Interés Cultural, ni tampoco del área de Carreteras de la institución insular.
Domingo González Arroyo intentó detener los trabajos
Fuentes presenciales informaron a Crónicas de Fuerteventura que el propio Domingo González Arroyo se personó en el lugar a primera hora de la mañana, increpando a los operarios del Cabildo para que se detuvieran en los trabajos, y clamando que el lugar era de su propiedad. Los operarios tuvieron que trabajar de manera intermitente, parando en sus labores en cada ocasión que González Arroyo se les acercó para intentar detenerles.