Maldita homofobia, maldito machismo
Continúan las agresiones grupales hacia el colectivo LGTBIQ+, continúan queriéndonos borrar del mundo y quieren desesperadamente que sepamos que es por ser “maricón”.
No importa cuándo leas este escrito, es atemporal, nos siguen matando y van en grupo, ahora no solo escuchamos la palabra sino que además nos la graban en el cuerpo con el filo de una navaja entre 8 malnacidos.
Esto ocurre y hago responsable a los discursos de extrema derecha, que encima tienen la poca vergüenza de decir “no es culpa de nosotros”, sí lo es, porque mientras ustedes señalan, otros disparan, otros que antes estaban escondidos en sus mundos de conspiraciones porque sentían vergüenza que los tomaran por bobos, ahora se sienten identificados y justificados por esos discursos llenos de odio.
Sentimos miedo de ir por la calle con nuestras parejas y mostrar afecto por ellos o ellas, miedo a que nos agreda o acabar asesinados de una paliza.
Hace unos días, un segurita decía a una pareja de chicos que no se mostraran afecto en público. ¿Esto es en serio? Y todo eso supuestamente lo dijo dentro de un contexto paternalista protector, pero no, no me lo creo.
Hago un llamamiento a los y las heterosexuales a que se unan y nos apoyen, quizás no les toque de cerca, pero el mundo da muchas vueltas.
No podemos consentir que estos discursos de odio sigan avanzando y encima tienen líder