Hoy quiero hacer hincapié; por todos esos niños, que en silencio están librando batallas; por su identidad sexual. Muchos niños viven verdaderas tragedias por vivir bajo el seno de familias conservadoras, que aún piensan que ser de otro orientación sexual; es una enfermedad.
Cuando algún niño me cuenta su sentir y el terrible pavor que siente por miedo; a que sus padres les peguen o no los acepten; me acongoja porque no puedo ayudarlos. Mi papel es delicado y solo, puedo escucharlos.
Escritores como García Lorca o nuestro Óscar Wilde, ¿fueron menos persona o malos escritores por ser gays?
La sociedad es a veces hipócrita; muchas veces oigo comentarios despectivos con esos adjetivos tan descalificativos; que me enervan.
Quiero aparentar ser buena persona; y hago un despilfarro de palabras despectivas; hasta a mi propio hijo por ser gay o lesbiana.
No creo que podamos juzgar a nadie, he visto en redes sociales; señores padres de familia; buscando chicos de 18 años, activos o pasivos y luego son los primeros; en despreciarlos con palabras despectivas.
¿Qué sociedad estamos construyendo? Se ha avanzado mucho y aún hay mucha homofobia.
"Qué guapo eres; tendrás a las mujeres locas". Ese daño a veces sin intención, otras con mucha, puede llevarlos al borde de todo.
Somos padres y madres; no lo olvidemos, en cualquier momento, nuestros hijos pueden estar pasando miedo, por no decirnos su orientación sexual. Primero son personas; que sufren; que disimulan...su mejor amigo es el miedo. No seamos hipócritas y dejemos de hacer comentarios hirientes, ellos y ellas son primero personas, lo demás es secundario. No me doy golpes de pecho en una iglesia y luego suelto, por mi boca, atrocidades hacia personas; que quizás tenga en mi propia casa.
Ahí tenemos a Bolsonara, echando serpientes por su boca. "Si veo a dos hombres besándose en la calle, les voy a pegar".
Y habla, de que son defectos de fábrica, este señor, que alienta a la destrucción de esos bosques del Amazonas, alentando a la tala de árboles. No comprendo cómo se puede permitir; hablar tan mal de personas con diferentes orientaciones sexuales y nos quiere quitar el pulmón del mundo; el Amazonas.
En Chechenia, esos campos de tortura para homosexuales, se ha avanzado, pero aún escucho a niños; muy aterrorizados por ese miedo a sus padres.
Esa típica, tópica pregunta. ¿Tienes novia, novio? Se puede hacer tanto daño con una sola palabra, que si lo escucháramos como lo hago yo; en el ámbito estudiantil, ni la pronunciaríamos. Una persona no es una vagina o un pene, es mucho más. Lo único que quieren es que se les quieran tal como son. Es fácil mirar dentro, no te quedes con sus cejas depiladas o que camina raro. SON PERSONAS CON CORAZÓN Y SUFREN.