¡Así no podemos continuar!
Los problemas estructurales que tiene el Sistema Educativo son por todos conocidos y se han ido agravando durante los últimos treinta años. Nada se ha hecho para solucionar estos graves problemas. CSIF los identifica en seis grandes bloques:
- Inestabilidad legislativa.
- Altos niveles de fracaso escolar.
- Paro juvenil.
- Bajo nivel educativo.
- Diferencias entre Comunidades Autónomas alarmantes.
- Escaso reconocimiento de la labor docente y su consideración como profesional.
Sin embargo, lejos de afrontar la solución de estos problemas de una manera decidida, los diferentes gobiernos tanto nacionales como autonómicos se dedican a luchas partidistas con medidas cara a la galería sin atender a las demandas profesionales ni al consenso entre el profesorado. Hace falta contar con este cuando se ponen en marcha leyes educativas.
Todas estas medidas no aportan nada a la mejora del sistema, más aún, agravan los problemas estructurales al desautorizar y desprestigiar la labor docente y cargar con más y más burocracia al profesorado.
El personal docente, pensando solo en su alumnado, saca todo adelante manteniendo el sistema educativo sin ayuda de nadie. Es más, desarrolla su labor con palos en las ruedas puestos por las administraciones con declaraciones que ponen en entredicho su preparación y formación. Esto pone en duda la libertad de cátedra, la especialización docente y el prestigio profesional de un colectivo altamente vocacional y dedicado.
Ley tras ley, se pierden oportunidades para tomar medidas estructurales que mejoren el sistema. Gobierno tras gobierno, se ponen sobre la mesa iniciativas partidistas que distraen a la sociedad de los verdaderos problemas. Estos que, sobre todo, afectan en gran medida a la educación pública.
CSIF dice ASÍ NO PODEMOS CONTINUAR. Queremos sensibilizar a la sociedad de los problemas de la educación. Queremos exponer que no se puede cargar todo sobre el profesorado sin ayuda y sin tenerlo en cuenta.
Tenemos que levantar la voz de manera clara y profesional. Es una lucha de todo el colectivo docente, que a nadie más parece interesar si no es para utilizarlo hasta las próximas elecciones.
Por la dignificación de la labor docente.