jueves. 28.03.2024
Jóvenes majoreros dedicados al gaming.
Jóvenes majoreros dedicados al gaming.

Franchu Morales y Marta Martínez son veinteañeros, naturales de Fuerteventura, y se dedican en cuerpo y alma al gaming, término que se refiere a los videojuegos desde un punto de vista profesional. Morales lo hace como caster (comentarista) y a través de la comunidad que ha fundado, Fuerteventura Gaming, y Martínez como fundadora y directora de un club de eSports (deportes electrónicos), llamado FtvCanarias. Con motivo de la celebración esta semana del I Torneo Insular de eSports, organizado desde el Cabildo, participaron en la tertulia de La Mañana en Cope Fuerteventura, junto al periodista Janey Castañeyra, y el docente e ingeniero informático Daniel Rodríguez.

En el marco de este debate, explicaron las experiencias vitales que les han llevado a dedicar sus vidas a los videojuegos. En el caso de Franchu Morales, recuerda que fue su padre quien le ánimo a que probara el mundo de los videojuegos, "porque vio no solo una oportunidad de entretenimiento para su hijo, sino para tratar de despertar en mí esa inquietud por adquirir más conocimientos. Y lo hizo a través de los videojuegos. Entonces, yo ya con 12 o 13 añitos, me fui poco a poco metiendo en este mundillo".

En aquel entonces ya apuntaba su talento para hablar y comentar, rememora: "comentaba los videojuegos jugando con mis primos. Yo era malísimo en el Pro Evolution, pero hacía de Manolo Lama". A los 16 años, le ofrecieron su primer contrato profesional como comentarista de eSports, fue ascendiendo poco a poco, y así hasta el momento actual, en que se saca un salario comentando Counter Strike, de madrugada, ante unas 75000 personas, y trabajando para la televisión de un club de California (EEUU). A sus 23 años, Franchu duerme de 3 a 5 horas al día, pues compagina su labor de comentarista con la de técnico audiovisual, y cobra más que un ingeniero. 

En el caso de Marta Martínez, recuerda que "siempre me habían gustado los videojuegos. Hasta que un día dije: me gustaría que Canarias llegara a algo. Porque tenemos equipos canarios que no salen de aquí, y estaría bien que desde fuera sepan que existimos, que somos igual de buenos que los de la península, o los de Latinoamérica". Los comienzos fueron difíciles para ella, con el juego para móviles Clash Royale, hasta que se sumó al equipo un creador de contenido de cierta relevancia, Cara Anchoa, con quien el equipo comenzó a levantarse. "Los dos aprendimos muchísimo –asiente Marta-, fuimos creciendo, y ahora tenemos además de Clash Royale, Fortnite, War Zone o Brawl Stars".

A sus 21 años, también es directora deportiva de otro equipo, y están creando sinergias en torno al League of Legends con un club de Tenerife, Colosus, para compartir entrenamientos y coordinar competiciones. Marta cuenta actualmente entre las filas de su club con jugadores canarios, pero también de Argentina o México, y has llegado a incluir en competiciones a jugadores semiprofesionales. Aunque todavía no ha alcanzado el objetivo, afirma que "me gustaría vivir de esto". Y está a las puertas.

En este sentido, explica Franchu, "ahora con las redes sociales cualquiera puede dar el salto. Hay equipos amateur con grandes talentos, con apoyo de marcas, y ahora con las redes sociales es más sencillo. Es una barbaridad, basta con que se haga viral un clip tuyo en Twitch, YouTube o TikTok, para que se fije en ti. Y si eres bueno, ya puedes dar ese salto".

Estos jóvenes emprendedores también tratan de desestigmatizar a los videojuegos como fuente de problemas. En el ámbito de un club, Marta planifica "los entrenamientos de una hora y media o dos horas. No recomiendo más de cuatro", y siempre teniendo en cuenta el aspecto psicológico.

Daniel Rodríguez, como docente del ciclo de Informática en el IES Majada Marcial, explica que desde el Ministerio ya están creando máster de especialización para continuar después de la formación profesional, como por ejemplo el de Desarrollo de Videojuegos. "Es evidente que este sector está en crecimiento, que ha alcanzado o superado al cine, y es algo donde empiezan a existir todo tipo de profesiones. Se puede ser caster, como Franchu, pero también otras profesiones", por ejemplo, alrededor de los jugadores profesionales, indica. "A los jugadores de eSports ya se les pone un nutricionista, un preparador físico, y van al psicólogo, como si fueran profesionales de fútbol".

Y además, hay también dentro de los propios videojuegos un mundo inmenso de posibilidades, "porque hace falta gente para todo, la programación, crear la historia, diseñar los personajes…, y para eso tienes que especializarte", a lo que añade Franchu: "solo para diseñar un personaje, puede haber hasta cinco o seis personas diferentes". Daniel Rodríguez ilustra el potencial de este mundo con una frase: "el fútbol está perdiendo auge está perdiendo seguidores. ¿Y a dónde se están yendo? Esto es el comienzo de algo muy importante".  

Jóvenes majoreros se ganan la vida con los videojuegos