Verónica Fraguela y Noelia Suárez

"Somos la segunda reserva de la Biosfera que hemos creado una marca de alojamientos rurales en España"

"Queremos que el huésped que visite uno de los alojamientos rurales que se encuadran en el proyecto participe a su vez en el entorno local"

"Ellos quieren vivir la experiencia como si fuera un local. Con un poco de tiempo y trabajando se consolidará el turismo rural en Fuerteventura"

Verónica Fraguela Monaga, presidenta de la Asociación Red Rural Fuerteventura Sostenible, y Noelia Suárez Hernández, técnico del proyecto Fuerteventura Rural, han explicado en una entrevista para COPE Fuerteventura como ha sido la tarea, durante cuatro años, de crear esta marca de Ecoturismo en la isla de Fuerteventura, con la que han accedido a pertenecer a la marca a nivel nacional, la Red Española de Reservas de la Biosfera. Las representantes de esta asociación cuentan que este es un proyecto que está dando sus primeros pasos y que debe mantenerse en esa línea porque para seguir pertenieciendo a la marca nacional se deben cumplir y cuidar ciertos requisitos en relación a los Objetivos de Desarrollo Sostenible impulsados por Naciones Unidas.

¿Cómo resumirían esta asociación y la fusión que ha desembocado en este proyecto?

Noelia Suárez (N.S): Este proyecto comenzó a partir de la unión de alojamientos turísticos rurales, que en Fuerteventura se encuentra la menor red de alojamientos rurales, entonces, a partir de esa proyección, esa red y esa ayuda a digitalizarles y a que fueran competitivos y no se extinguieran empezó todo esto. Había dos asociaciones que estaban un poco paradas, tenían algo de actividad, pero no mucha, y hemos creado, a través del proyecto de la marca de la Reserva de la Biosfera local, que era necesaria para acercarnos a la marca nacional, se nos exigía que creáramos una marca local y con identidad propia, y que se exige a cada destino. Nosotros de todas formas somo la segunda reserva de la Biosfera que hemos hecho esto en España. Somos un poco pioneros porque hemos sabido recoger toda esta esencia, pero somos humildes porque queda recorrido, todo es trabajo y tenemos que aprender a adaptarlo a que no sea solo una marca promocional, sino que sea una marca y también una herramienta de trabajo, y unirnos y trabajar estos años juntos. Actualmente hay 17 alojamientos rurales, con los que estamos en continuo contacto y estamos trabajando de forma conjunta. No quedan muchos más por incorporarse. Si es verdad que el proceso de marca lleva una auditoria, y ver que significan estos ejes de vinculación con el territorio.

Porque necesitarán unos requisitos para poder formar parte de la red

N.S: Exacto, son compromisos medioambientales, energéticos, también con el comercio local y los productores de la zona. La marca se trata de eso, que como alojamiento potencies tu entorno y visibilices tu entorno. Entonces, ese fue un poco el trabajo inicial y ahora estamos en un punto que dentro de la plataforma Fuerteventurarural.org hay unas 70 iniciativas incluidas en ecoturismo, como museos, guías, artesanos, Startlight y astroturismo, turismo activo y demás, y a partir de visibilizarles y reordenar este territorio estamos haciendo esta labor de eco-destino muy interesante, ética, responsable y educativa con la isla, que sepan los viajeros como utilizar estos recursos y por qué, por ejemplo, porque es importante comprar a un productor local del sector primario y que vean que el impacto que tengan con sus acciones repercute a la vida local. Un trabajo muy bonito.

¿Cuánto tiempo llevan con este proyecto?

Verónica Fraguela (V.F): Cuatro años trabajando, que se dice pronto. Muchos obstáculos, pero muy gratificante, porque cuando nos dimos cuenta que las dos asociaciones buscábamos lo mismo, con una misma línea de trabajo y cada una con su idiosincrasia, porque cada alojamiento no tiene nada que ver uno con otro, lo único que podíamos hacer era fusionarnos y viento en popa. Desde nuestros alojamientos siempre promocionamos no solo lo que tenemos cerca, sino también actividades deportivas, culturales, y todo según los recursos que haya en el municipio, nosotros lo publicitamos porque queremos que el huésped que visite uno de los alojamientos que se encuadran en el proyecto participe a su vez en el entorno.

¿Esa diferencia entre viajar y visitar?

N.S: Exactamente, de hecho, nosotros no los llamamos turistas porque esta palabra lleva implícita una connotación peyorativa, y algo frío que le hemos aportado nosotros. Por eso hablamos de viajeros, porque sabemos que cuando viajamos y conectamos con las culturas locales, porque viajar no es solo el paisaje verlo e irte, sino con las personas, salen transformadas de ese lugar y quieren volver y contar lo que han visto y lo que han sentido. Es el inicio de los viajes, al final viajar empezó así, salir de tu circulo y aprender otra cultura. Ahora lo que tenemos que hacer es ordenar la información para poder potenciar todas las actividades e iniciativas de los Ayuntamientos, con quienes nos estamos reuniendo ahora, para que el turista o el viajero, puedan disfrutar, porque quien venga no entiende de fronteras, no sabe dónde empieza un municipio empieza otro.

¿Cuáles son las expectativas de este verano?

V.F: la situación ahora mismo es u poco difícil de valorar. Cada vez más el huésped demanda otro tipo de actividades y de cosas que antes no demandaba. Para mí, es super gratificante cuando te preguntan para hacer alguna actividad como la haría yo, como la haríamos las personas de aquí. Ellos quieren vivir la experiencia como si fuera un local. Con un poco de tiempo y trabajando se consolidará el turismo rural en Fuerteventura.

¿Se ha vuelto a dar importancia a las experiencias más pegadas a la tradición y a la naturaleza?

N.S: Con la pandemia ha habido una tendencia global hacia un cambio de paradigma en el que existe una dualidad hombre-naturaleza, porque es la naturaleza la que nos da ese descanso y nos hace darnos cuenta de la importancia de disfrutar de las cosas sencillas de la vida. Fuerteventura como tiene estas cualidades espacios amplios, poca densidad demográfica y una población con valores muy humanos, muy poco influidos o manipulados por lo económico o los intereses, esto potenciado con las redes y la digitalización, ha hecho que tuviera mas visibilidad el trabajo que ya estaba hecho. Ha ayudado también el contexto en el que se encuentra el mundo.

V.F: ha sido duro pero gratificante. En la certificación todos los alojamientos hemos llegado de la mano. Es un logro brutal. La certificación Biosfera, que, además, queremos aclarar que no se trata de una certificación de por vida, tenemos que seguir trabajando en el camino para cumplir esos criterios e irlo consolidando todo, para eso han sido las auditorias y el asesoramiento a través de Fuerteventura Rural. Para mí, lo importante era que llegáramos juntos, porque creo que había una visión de nosotros que no era acorde a la realidad. Cuando tu trabajas sin hacer ruido parece que no estás haciendo nada, pero aquí estamos.

N.S: se ha empezado por los alojamientos de la marca porque son un poco el eje de la marca, el tronco que aúna el resto de los recursos. Ahora mismo, en el evento de certificación se pretende hacer lo mismo con los manuales de marcas de cada uno de los sectores con unos valores que hay que cumplir en cada uno de ellos, como puede ser de artesanía, turismo guía, restaurantes, etc. trabajar con cada uno de los sectores y de la mano de otras asociaciones.

¿Qué sea algo transversal?

N.S: Exacto, que los valores de marca no se circunscriban a los alojamientos. Evidentemente lleva una burocracia porque crear un manual de marca lleva un trabajo que tiene que estar bien hecho para el futuro, para que los valores de medio ambiente y del buen uso de los recursos pervivan y den la oportunidad a que siga adelante la red y la isla. Es una herramienta para seguir trabajando y luchar por estos objetivos de desarrollo sostenible. Es bonito ver como la gente interiorizar y valora poco a poco estos valores.

¿Crees que la gente incluye y asume estos valores como propios?

N.S: Sí por supuesto, lo van interiorizando.

V.F: Sí, en nuestro caso, por ejemplo, hay varios locales que no tienen que ver con el alojamiento y sin embargo se han sumado. Es tejer conexiones, aunar y trabajar. A mí me gusta recalcarlo porque no es la Panacea. Cuando uno llega a un objetivo es porque hay algo detrás. Todas las dificultades que nos ha supuesto la pandemia y hay compañeros que lo han pasado realmente mal y aquí estamos, y hemos seguido trabajando y es importante recordar esto.

NS: Son las alianzas. Es el pensar que, si al otro le va a ir bien, también a mi me irá bien. Este es el pulso, no estamos solos. Hay que tener la consciencia de que si al que esta a mi lado le va mal a mi me va a ir mal pronto porque es un indicador. Crear cooperación entre los alojamientos, y también la colaboración público-privada, hasta ahora habíamos tenido menos visibilidad, la reserva de la biosfera siempre había abanderado esto por la parte del desarrollo rural, también Tocoa el turismo porque somos una isla turística. Ahora con la Consejería, ayuntamientos y entidades hemos estado teniendo la escucha y ese contacto que es vital.

VF: Esto es parte de lo bonito del proyecto, el poder ayudarnos los unos a los otros. Solucionar los problemas juntos.