El PP rechaza que el alcalde de Puerto del Rosario diga que "no se mete en relaciones privadas"
Ante la querella presentada por una ex cargo de confianza del Ayuntamiento de Puerto del Rosario contra un concejal del Gobierno, José Juan Herrera, y el propio alcalde, Juan Jiménez, publicada en primicia este martes en Crónicas de Fuerteventura en la que se les acusa de un presunto acoso sexual y encubrimiento del mismo, y tras esperar 24 horas a que el grupo de gobierno y concretamente ellos salieran al paso de dichas acusaciones, salvo una versión del alcalde que no les convence en redes sociales, el Partido Popular (PP) manifiesta en la nota enviada a este medio que "debemos condenar y condenamos cualquier comportamiento, actitud o expresión que denigre a una mujer". "No es no, siempre y sin excusas", afirman ante las nulas explicaciones dadas hasta ahora para ofrecer la versión de los afectados.
Consideran que el hecho que se relata en la querella es de extrema gravedad y que la prioridad debió ser siempre proteger a la mujer que estaba siendo víctima de un presunto delito de acoso sexual. Por tanto, piden que tanto el alcalde como el concejal de Obras y Servicios salgan a explicar y a aclarar lo que se relata en la querella.
En la nota, además, explican que "rechazamos y condenamos la respuesta que el alcalde ha dado en redes sociales y en diferentes medios de comunicación en la que se ha expresado diciendo que no se mete en relaciones privadas", dándole calidad de "relación personal" a un presunto acoso sexual del que le habían puesto en conocimiento, al menos y siempre según la querella, hasta tres personas incluyendo la propia víctima sin que el alcalde hiciera nada"
Lamentan desde el PP la inacción del alcalde para proteger a la mujer víctima de un presunto acoso sexual pues, como él mismo ha manifestado, fue conocedor de tales hechos y no activó de oficio el protocolo al que ahora hace mención en los medios de comunicación, ni consultó a la víctima sobre la procedencia de activarlo ni apartó al concejal. Consideran que el único protocolo que activó fue para salvar su Alcaldía y no el que correspondía, proteger a la mujer víctima de un presunto acoso sexual en el ámbito laboral.
Por otro lado, rechazan el silencio del resto de partidos que conforman el Gobierno municipal (Podemos, Ciudadanos y Nueva Canarias) así como por parte de sus compañeros de pacto en el PSOE, por respeto a todas las mujeres, a los vecinos de Puerto del Rosario y por el bien de la propia institución en la que estas personas ejercen sus responsabilidades.
Aseguran que las mujeres de ese grupo de gobierno no pueden comportarse como el alcalde excusando esta querella en que es "política" pues con sus actos deslegitiman la propia lucha feminista, deslegitiman la voluntad de una mujer de denunciar estos hechos ante terceros, pisan los derechos de las mujeres y todo eso que dicen defender detrás de pancartas: el feminismo es y se demuestra hoy, cuando hay que defendernos, unidas, de actos repudiables como estos. Su silencio las hace cómplices