Oasis Wildlife despidió a Biocho, el camello majorero más longevo

El camello Biocho.

En noviembre, este animal tan querido por los visitantes y el equipo de cuidadores de Oasis, habría cumplido 35 años siendo el camello más viejo de Canarias

Biocho, el camello más longevo de Fuerteventura, ha fallecido a los 34 años de edad por motivos naturales, informó recientemente Oasis Wildlife. El animal fue uno de los camellos guía durante décadas en el zoológico y centro de rescate y recuperación de especies de flora y fauna de La Lajita, y ha participado en numerosas actividades formativas, teniendo un papel fundamental en la educación y concienciación sobre la importancia y el valor de la raza de camello canario.

Biocho ha sido un camello muy querido, tanto por los visitantes del centro de rescate como por el equipo de Oasis Wildlife Fuerteventura. Con un carácter tranquilo y sereno, impresionaba a todos los que se acercaban a él con su mirada, su elegante porte, su gran tamaño y su pose sobre la tierra, cuando se revolcaba para tomar el sol o para descansar.

Un camello guía muy querido

Nació en Fuerteventura, como parte del programa de conservación del camello canario, y paso a convivir en manada con cientos de individuos de su especie, siendo desde su llegada líder de la misma. Biocho pronto se formó para ser un camello guía, por su templanza y valentía, siendo encargado de dirigir al resto de la manada en formaciones o paseos. Años mas tarde, fue seleccionado en los programas de educación ambiental, donde pudo transmitir el valor de su raza, y dejar una gran huella en todos los que le conocieron. 

El camello Biocho con Guacimara Cabrera.

Biocho participó en importantes acciones educativas, tanto dentro como fuera de Fuerteventura, dirigidas a ampliar el conocimiento sobre el camello canario y mostrar la importancia que ha tenido esta raza para las Islas Canarias. "Con estos encuentros conseguimos que niños y adultos se enamorasen de Biocho y al mismo tiempo se enamorasen de una raza que había que conservar y que hasta ahora era una gran desconocida", ha asegurado Guaciamara Cabrera, gerente de Oasis Wildlife, que contaba con una vinculación muy especial con el animal. "Este camello recibía cartas y obsequios de visitantes de todo el mundo, de niños que venían a campamentos y lo admiraban, o que le conocieron en la reserva de sus Majestades de Oriente en Navidad".

Una especie en peligro de extinción

La raza autóctona canaria ha sufrido una disminución de más del 60% de la población en la ultima década. En la actualidad, únicamente quedan unos 1.200 en todo el mundo. Se trata de una raza emblemática, de gran importancia genética, ecológica y turística, que gracias al esfuerzo de conservación continuado de centros como Oasis Wildlife, de los ganaderos de las asociaciones de criadores de camellos y de los Cabildos insulares, ha logrado mantenerse como patrimonio natural. Su presencia contribuye de forma decisiva a las tradiciones culturales y la economía turística rural del pueblo canario.

El censo de camello canario, ha sufrido una fuerte regresión en el medio rural debido a la mecanización del trabajo agrícola. Sin embargo, la granja camellar de Oasis Wildlife, Dromemilk Camel Farm, cuenta con mas de 400 ejemplares, en su mayoría de esta raza, situándose como el centro más grande de Europa en el cuidado y conservación de este animal

Actualmente Biocho formaba parte de la reserva de camellos ancianos de Dromemilk Camel Farm. Estos camellos reciben los mejores cuidados en sus últimos años, realizando largos paseos, descansos y baños, acompañados siempre por los expertos camilleros de Dromemilk. Desde Oasis Wildlife se muestra a los visitantes, de esta forma, la belleza de estos animales en la última etapa de su vida, su valor y su importancia, más allá de su presencia física.

Máximos cuidados y calidad de vida

 "Para la familia de profesionales de Dromemilk Camel Bio Farm y Oasis Wildlife queda la satisfacción de saber que los años trasncurridos en el centro de conservación ha gozado del máximo bienestar y, sobre todo, que le han cuidado y mimado de forma especial para que disfrutara de la mayor calidad de vida hasta el final de sus días", ha señalado Cabrera.

Biocho nació en Fuerteventura, en Oasis Wildlife, y fue criado a mano por el equipo técnico, y desde entonces ha sido el compañero inseparable de otros camellos de su edad, con los que se ha criado, ha jugado, interactuado y ha formado una manada.  El día anterior a su fallecimiento, el animal se encontraba perfectamente, incluso participó en alguno de los talleres educativos donde el personal técnico tiene un trato más proximo. A primera hora de la mañana, con el inicio de las rutinas diarias de control, se encontró que Biocho no quería seguir caminando, y de forma inmediata se puso en marcha un protocolo especial con todo el equipo de cuidadores y veterinarios".

El camello Biocho en Oasis Wildlife

"Los dromedarios tienen una esperanza de vida de entre 25 y 35 años, aunque se ha demostrado que es un porcentaje muy pequeño el que supera los 30. Cuando Biocho cumplió 34, en Canarias no se conocía un camello tan longevo, por lo que podríamos considerarlo el camello más anciano de las Islas", ha asegurado Cabrera. "La experiencia hace que sepamos leer las señales que ofrece el cuerpo de los camellos cuando se aproxima su fallecimiento y nos ayuda a estar preparados para cuando llegue ese triste momento podamos afrontarlo de la forma más serena posible, como ha ocurrido con Biocho".

"Para la familia de Oasis", ha señalado Cabrera, "ha sido un duro golpe. Biocho ya descansa en su casa, desde donde podemos seguir honrándole cada día, concienciando a todo el que acuda de la necesidad de proteger su especie".